Juan 6:26–30
26 Jesús les contestó: "Les aseguro que ustedes me buscan, no porque vieron señales milagrosas, sino porque comieron pan hasta saciarse. 27 No trabajen por la comida que perece, sino por la comida que permanece para vida eterna, la cual les dará el Hijo del hombre. Porque a este es a quien Dios el Padre ha puesto su sello de aprobación."
28 Ellos le preguntaron: "¿Qué debemos hacer para realizar las obras de Dios?" 29 Jesús les respondió: "La obra de Dios es esta: creer en el que él ha enviado."
30 Le dijeron: "¿Y qué señal milagrosa nos mostrarás para que te creamos? ¿Qué puedes hacer?
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Jesús, al poder ver las intenciones de la multitud, percibió de inmediato que sus motivaciones eran impuras. La multitud estaba interesada principalmente en lo que podían recibir, como comida gratis. De manera humorística, los espectadores pidieron otra señal para que Jesús probara quién era, como si la sanación milagrosa de un hombre con discapacidad (Juan 5:1–15), alimentar a cinco mil personas (Juan 6:1–15) y ser transportado milagrosamente a través del mar (Juan 6:21–24) no fueran suficientes.
En 2001, Glen y Gloria Sims participaron en el sorteo de un millón de dólares de H&R Block. Cuando un representante de H&R Block llamó con la buena noticia de que habían ganado, los Sims colgaron el teléfono, creyendo que la llamada era una broma. Los intentos adicionales por teléfono y correo no lograron convencerlos de que eran ganadores. Los Sims creían que eran víctimas de una estafa. A medida que se acercaba la fecha límite para aceptar el premio de un millón de dólares, el último intento de H&R Block de contactar a los Sims tuvo éxito. Finalmente reclamaron su premio.
Un premio de un millón de dólares estaba esperando a que los Sims lo reclamaran, pero eran demasiado escépticos para creer en la evidencia. Así como el escepticismo impidió que los espectadores en Juan 6 comprendieran quién era Jesús, el escepticismo y la duda impiden que muchos hoy en día experimenten el don del Espíritu Santo, los milagros y la liberación. No debemos permitir que el escepticismo nos impida experimentar lo que Dios tiene para nosotros.
Eso concluye nuestro devocional de hoy. Terminemos con una oración.
PALABRA DE ORACIÓN
Señor Jesús, al reflexionar sobre Tus palabras a la multitud, resaltando su enfoque en lo temporal en lugar de lo eterno, recuerdo mis propias tendencias a buscar la gratificación inmediata en lugar de buscar la vida eterna que Tú ofreces. Es fácil dejarse atrapar por los deseos de lo material y olvidar el alimento espiritual que Tú provees y que verdaderamente satisface.
Ayúdame, Señor, a cambiar mi enfoque de lo perecedero a lo imperecedero, de lo tangible a lo eterno. Enséñame a anhelar Tu presencia más que cualquier cosa que este mundo pueda ofrecer. Que el deseo de mi corazón sea conocerte más, creer profundamente en Ti y seguirte de cerca.
Perdóname por las veces que he dudado de Tu poder y Tus promesas, buscando señales en lugar de confiar en la verdad de Tu Palabra. Fortalece mi fe, Señor, para que no busque señales para creer, sino que tenga una fe que cree sin ver. Abre mis ojos a las formas milagrosas en que estás obrando en mi vida cada día.
En momentos de escepticismo y duda, recuérdame la historia de los Sims y cómo el escepticismo casi les cuesta una gran bendición. Que sea una lección para mí no descartar Tus bendiciones y promesas debido a la incredulidad. Que esté abierto a recibir todo lo que Tienes para mí, abrazando Tus dones con un corazón lleno de fe y gratitud.
En el nombre de Jesús, amén.
