Ana, la profetisa, es un ejemplo de una vida bien vivida al servicio del reino de Dios. Ella es la única profetisa mencionada por nombre en el Nuevo Testamento. La historia bíblica de Ana aparece en Lucas 2:36-38. Por medio de su fe constante, Ana nos invita a contemplar la esperanza viva que encontramos en Cristo Jesús.
Ana la Profetisa