Mi deseo, a través de esta serie, es que veamos a Jesús y al conocerle
experimentemos su efecto transformador en nuestras vidas (2Co 3:18 “Por
tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria
del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como
por el Espíritu del Señor.”)
b. No había mejor sentimiento que, cuando se había ido la luz, de repente
regresaba y todo tenía sentido otra vez
c. Él es la luz del mundo…
i. Si no sabes cuál es el camino, deja que el lo alumbre
ii. Si te sientes desordenado, sin forma o en caos… la luz es la solución
iii. Si te sientes vacío, deja que su luz te llene
iv. Si estás estancado en una vida rodeada de oscuridad, deja que su
luz alumbre en tus tinieblas
d. Quizás el Señor ya te ha rescatado de las tinieblas…
i. De todos los “yo soy” que vamos a ver, “la luz del mundo” es el único que
él explícitamente comparte con nosotros
ii. Mat 5:14-16 “Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre
un monte no se puede esconder. 15 Ni se enciende una luz y se pone
debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que
están en casa. 16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para
que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está
en los cielos.”
iii. Por supuesto, no somos una luz como Jesús…
1. Él es el sol, nosotros la luna… alumbra pero como reflejo del sol
2. Él es el sol, nosotros los espejos… hay sistemas de iluminación de
cuevas enteras, solo con espejos
e. Así que, recibimos la luz de Cristo e imitemos a Cristo, siendo luz en este mundo,
para otros también le conozca y glorifiquen a Dios
