Dios te ama y quiere que te vaya bien, cuando tu te empecinas en pecar, tu te alejas de Dios, te sales de su protección y caes en maldición.
El único camino hacia la bendición es la obediencia a Dios. Obedecerle significa dejarnos guiar hacia donde Él quiere llevarnos y evitarnos vivir aquello de lo que Dios nos quiere salvar. Si no obedeces a Dios, ¿cómo esperas que Él te lleve y te guíe hacia tierras de bendición?
Serie: El Año de Ver La Gloria de Dios
Pastor Pedro Villegas