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Las plantas enfocan luz

May 22, 2017

Salmos 1:1-3 “Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado, sino que en la ley de Jehová está su delicia y en su Ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo y su hoja no cae, y todo lo que hace prosperará”. En muchas maneras, una planta es como una máquina que cambia la energía del sol en energía de alimento que es necesitada por el resto del mundo viviente. La energía que hace vivir a la planta es la luz. Las plantas enfocan luzAhora, ¿si usted fuera a diseñar una planta mejor y más eficiente, cómo lo haría? Obviamente, una forma de mejorar una planta sería si crea una que pueda realizar su trabajo con menos luz. Pero recuerde, la planta no puede almacenar más energía de la que recibe. Y si la planta fuese demasiado sensible a la luz, una fuerte cantidad de luz podría matarla. La solución obvia es revestir a la planta con diminutos lentes que se enfoquen inclusive luz tenue en los centros químicos donde la fotosíntesis se da. Debido a nuestra ignorancia, la ciencia moderna ha podido evadirse y pensar de las plantas como si fuesen formas de vida más simples y poco sofisticadas. Ahora, los científicos han descubierto que muchas plantas en realidad si tienen células especiales que enfocan y concentran la luz disponible en el centro donde la necesita. Se encontró que las hojas sombreadas de una planta intensificaban la luz disponible en un 26 por ciento. Y si la luz se pone tan fuerte que puede dañar las hojas, la luz se enfoca en las células que pueden absorber extra luz. Las plantas son seres vivientes mucho más complejos y de alto rendimiento de lo que alguna vez sospechamos. El diseño de las plantas incorpora diseños basados en conocimiento altamente sofisticados tanto de química como de física. ¡Qué maravilloso testimonio de nuestro Creador! Oración: Amado Señor, no hay nada en la creación que esté hecho pobremente – Tú has hecho todas las cosas con mucha perspicacia, cuidado y planificación. Ayúdame a entender mejor que así mismo Te involucras mucho más en mi vida y empiezas con el perdón de mis pecados. Amén.